El Ministro de Salud, Aníbal Cruz, formalizó hoy que se dio de alta a la paciente cero de Oruro, quien estuvo internada por 17 días por coronavirus. No sólo esta es una buena noticia para el país, sino que hay un hecho aún más notable, Oruro cumple 10 días de silencio epidemiológico mientras que en las otras ciudades del país las cifras de infectados van en ascenso, así como también, la cantidad de fallecidos.
Analicemos cómo logró Oruro estos resultados. La presidenta Jeanine Añez, ordenó la Cuarentena nacional el 22 de marzo mientras que en Oruro el Gobierno Autónomo Municipal, junto a otras autoridades emitieron la ordenanza de cuarentena CINCO días antes, pese a las críticas por el gobierno central, Oruro mantuvo su cuarentena de manera ininterrumpida
Gabriela Romay funcionaria de una entidad bancaria en Oruro, asegura que, una vez puesta en vigencia la Ordenanza municipal, todo cambió, las oficinas donde trabaja diariamente simplemente cerraron.
Martes, miércoles y viernes sólo podías comprar en el mercado y la primera semana no habían ni policías ni militares para controlar esto, sin embargo la gente cumplía con la ordenanza
Gabriela Romay
Fabricio Pers, propietario de la fiambrería, Brangus Steak House ve con preocupación el futuro y manifiesta la realidad que muchos bolivianos viven, con relación al pago atrasado de alquileres, proveedores, sueldos y otros, pero manifiesta también que lo más importante es salvaguardar la vida e integridad de todas las personas.
Los locales comerciales podían estar abiertos hasta medio día y tenían que cerrar sus puertas a partir de las 13 horas
Jhael Ustárez, propietaria de la franquicia Express de Factory
Trabajo en conjunto Alcaldía y sociedad
La Alcaldía por su parte realizó fumigaciones y perifoneo constante exigiendo el cumplimiento de la cuarentena, así mismo, reclamaron por mayor atención de parte del gobierno central, ya que hicieron conocer que faltan más equipos de bioseguridad.
En este sentido y pese a las dificultades de infraestructura e insumos médicos que tiene Oruro, la curvatura de contagiados no ascendió y se destacaron varios elementos que se diferencian del resto de Bolivia, ellos son, la determinación de cuarentena temprana, el cumplimiento de la misma por parte de la población orureña, el trabajo de sus autoridades con los elementos que cuentan, desinfectando la ciudad y haciendo que se cumpla la norma para bien de su comunidad, además del cierre de las fronteras por parte del gobierno central.
La primera vez que escuché esta canción tenía catorce años y jamás imaginé que alguien en el otro lado del mundo podría escribir una letra así, que exprese tan claramente todo lo que sentía, absolutamente todo.
Esa profunda tristeza que se convertía las veces en agonía
era descrita de forma tan sentida y tan familiar para mi, al mismo tiempo que mis ganas de salir de ese
dolor sin saber cómo hacerlo, la derrota de dejarme llevar por un supuesto
final y al mismo tiempo mis deseos de continuar la vida se convirtieron en gritos silenciosos que gracias a esta canción tuvieron voz.
Parece que la vida se desvanece a lo lejos yéndose sin rumbo
más lejos cada día perdiéndose en mi interior nada importa, nadie importa
Los motivos de quien escribió esta canción tendrían que ser los similares a todos y todas quienes sufrimos una infancia marcada por el dolor de una familia rota, por el abandono, por la violencia y el abuso, pero sobre todo por una soledad desmedida.
Nadie más que yo puede salvarme pero es muy tarde ahora puedo pensar porque debería intentarlo
Estas palabras serían la tablita de salvación que me inspiró a continuar a pesar de todo y me hizo entender que la fuerza estaba dentro mío, nadie más lo haría por mi y así fue hasta hoy, sin el perdón de quienes lastimaron profundamente mi cuerpo y mi alma, sin arrepentidos, sin nada, con la sola convicción de pensar en que debería intentar continuar la vida a pesar de todo a pesar de ellos a pesar de mi propio dolor y continuar con el corazón deshecho y el alma pura.
Fade to Black es una canción que se encuentra dentro del álbum Ride de Lightning de la banda de thrash metalMetallica. Este álbum salió a la luz en el año 1984 y hoy por hoy Fade to black es una de las canciones infaltables en los recitales al vivo de esta leyenda del metal.
Fade to black, será por siempre la canción que me recuerde quien soy y quien fui, que me lleve al lugar en el que radica la fuerza que acompaña mi vida.
A finales de los años 80, Numa Hammel me llevó a conocer Fiebre Metálica una tienda de rock ubicada al inicio de la vieja feria de Barrio Lindo aquí en Santa Cruz de la Sierra.
Entrar allí, era iniciarse en el paraíso de la música, podía ver las pilas de discos y cassettes, poleras con la imagen de mis músicos favoritos, posters, revistas, (quien podría olvidar las Kerrang o Metal Hammer recuerda mi amigo Limbert), material exclusivo, el único problema radicaba en que en esa época era una simple estudiante de colegio y como recuerda mi amigo Garacho “el recreo no alcanzaba”. En la mayoría de las ocasiones, levantaba los discos, miraba las tapas, les daba vuelta, leía el material interior y olía ese material nuevecito nuevecito, ¡qué gloria!
En ese tiempo y debido al alto costo de estos materiales originales, se estilaba pagar por la copia a cassette como favor pedido a un amigo o pagado a bajo precio en las mismas tiendas de música.
Entrar allí, era iniciarse en el paraíso de la música
Más adelante, por los años 90 con la llegada del cd, otras tiendas de música harían su entrada al mercado cruceño, mis amigos Rodrigo, Daniel y Sergio, recuerdan a Bi Music, wodstock, Curiosidades, Roxy Music, Discolanda, Heavy Metal entre otras, estas tiendas eran los lugares favoritos de los metaleros de la época quienes buscaban material underground, bandas raras y novedades. También podías hacer pedidos mediante catálogo y esperar que llegue lo que pediste cruzando los dedos.
Asi transcurrían los 80 y parte de la década de los 90, con una dinámica de apoyo entre amigos para estar al día con lo último de las bandas metaleras. Los clubes de rock hicieron su aparición y tenían como uno de sus objetivos más importantes, compartir material entre sus iguales. Habia nacido una tribu urbana, Los Metaleros, esos melenudos y melenudas con poleritas negras que eran tachados como raros por una sociedad cruceña que aún le teme a los diferentes, a los no alineados con su estructura cultural tradicional de antaño.
Con la llegada de la tecnología, la música se masificó y las tiendas de música se fueron quedando sin clientes, plataformas como spotify actualmente ofrecen material a la medida de cada usuario muchos migramos a este tipo de plataformas con nostalgia de lo anterior.
Sin embargo, quienes crecimos valorando a la música como arte, muy a pesar de plataformas como spotify, NO renunciaremos jamás al material físico. Disfrutamos, abrir ese producto hecho a la medida de lo que esperamos, miramos una y otra vez los gráficos y fotos, lo presumimos con nuestros amigos, justo aquí en el mismo lugar y con la misma gente que conocimos en aquéllas tiendas de los años 80, algunos seguimos visitando las pocas tiendas de música que quedan como Metalmanía y nos enloquecemos en las tiendas que encontramos en el exterior del país.
La generación que creció junto a mí siempre se maravillará al encontrar una tienda de música abierta, lista para ir a escudriñar sus tesoros.
Llegó la plaza y fue amor a primera vista, cómo olvidar ese recibimiento
El 2005 después de siete meses de duro ensayo, un bus lleno de Simones del bloque Santa Cruz llegó con mucho entusiasmo a Oruro al majestuoso Carnaval de Oruro.
Tenía la maleta llena de ilusiones y de miedos por enfrentarme al reto más importante por el que había ensayado y me había esforzado tanto, me preguntaba si lograría terminar el recorrido si estaría a la altura del reto, qué pasaría si a pesar de tanto ensayo se me olvidarían los pasos, todos hablaban sobre la presión de los espectadores, “el público en Oruro no te perdonan si no cantas si no desbordas de alegría” decían, mientras pensaba para mí, que me había metido en un gran lio.
El día llegó, Sábado de peregrinación, tenía el traje listo, las extensiones para las trenzas estaban listas, sombrero, zapatos, todo, las Simonitas me ayudaron a vestirme, cuando una es novata desconoce tantas cosas y todo el ritual del arreglo es absolutamente un campo virgen lleno de preguntas.
¿Porqué te pones esas vendas en los pies? Ponete las vendas me lo vas a agradecer me decían.
¿Porqué te vendás la cintura? Ponete las vendas igual me lo vas a agradecer y realmente eso me pareció una exageración, asi que decidí no ponerme nada en la cintura, más tarde me arrepentiría con toda el alma, el ardor de ampollas y grietas que se me abrieron en la cintura por el movimiento me hacía repetir, porqué no me puse las vendas!!
Los piés, no entendía porque se frotaban tanto los pies, mis pies nunca me gustaron mucho asi que me parecía una pérdida de tiempo, los años de baile me enseñaron luego a amar mis pies y a consentirlos antes del baile, pobrecitos reciben la peor parte, horas y horas de baile en frio y en calor, reciben calambres, suciedad, dolor extremo y cansancio crónico, pobres pies.
El traje era un espectáculo, el maquillaje y el arreglo del cabello era un sueño verse así. Aquélla vez, Patricia Oropeza me maquilló, me dijo “lista, estas lista, ahora vamos al espejo vas a ver lo que hace el poder del traje” yo me reía hasta que me vi en el espejo, era yo pero diferente, estaba tan hermosa llena de detalles, sentía una fuerza y emoción tan grande, entendí rápidamente eso del Poder del traje.
Llegó la noche y era hora de salir al punto de partida. Estaban ahí los Simones de todas partes, habían llegado al igual que yo para ser parte de un espectáculo único e incomparable, la banda comenzó a sonar y esas canciones que antes eran algo lejano ahora serían parte de mi para siempre.
El recorrido fue increíble, toda la gente aplaudiendo y cantando con nosotros, sentí mi corazón a mil una y otra vez, los pies me mataban, había suciedad en el piso, pero perdí el temor de caerme, estaba pisando fuerte para no resbalar, pensaba una y otra vez, vamos paso a paso, tengo que llegar a la plaza.
Llegó la plaza y fue amor a primera vista, cómo olvidar ese recibimiento lleno de gritos, de emoción, de fuegos artificiales, veía el cielo lleno de luces que iluminaron mi alma, era mágico. Vamos con fuerza!! Decía Jaqueline Lino, la guía del bloque de cholitas, mientras decía yo para mi misma, mi primer año y estoy en segunda fila, ¿algo habré hecho bien no?. Saqué más valor, todos nos ven!! Wow cómo olvidar a la gente, de dónde són? Preguntaban, de qué ciudad vienen? Hermosas Simonas!! escuchaba tantas voces, la banda, las luces en el cielo, cantaba, escuchaba mi respiración, me fijaba en los pies estaba igualando? Este momento lo atesoro tanto.
Luego de pasar una prueba de fuego como el de la plaza viene el previo al final, la Av. Cívica que te espera con un espacio ancho lleno de cámaras, la gente más alejada, te sentís con alegría de casi concluir el recorrido pero al mismo tiempo con la tristeza de terminar un recorrido que siempre se hace poco para quien ama el Sábado de peregrinación. Pensaba para mi, esta subida interminable qué es no lo voy a lograr!! Nos ayudamos entre todas las de la fila para subir con fuerza hasta el patio previo a la iglesia del Socavón. Cómo lo logré? Con mucho coraje y locura.
Finalmente todo terminó o al menos eso creí. Llegué hasta el interior de la iglesia, ella estaba ahí esperándome, esa imagen perfecta de quien tiene una paciencia única porque te conoce, el de esa madre que ha estado ahí siempre en casa esperando que llegaras, la mamita del Socavón, podes decirle madre tierra, podés decirle sólo madre, podes decirle hermana o compañera, luna o patria pero jamás ignorarla, ella está ahí llenándolo todo. Después de llegar ante ella lo entendí, todo mi sacrificio y el regalo de participar en el recorrido era por ella, era para propiciar este encuentro entre ella y yo, entre yo y lo que tenía guardado mi corazón, era un momento de paz un inicio nuevo, una tregua, todo había valido la pena, me levanté tan enriquecida, tan amada y tan segura, jamás lo voy a olvidar.